Muchas personas quieren pedir un préstamo para pagar otro y por ello atrasar su deuda o intentarla pagar en cómodos plazos, a pesar de que ello suponga más tiempo a la hora de devolver el dinero.
Pedir un préstamo para pagar otro:
Esta operación se puede realizar, aunque conviene realizarla lo antes posible, con la vista puesta en la morosidad, ya que si entramos en una lista de morosos será muy complicado entrar en este tipo de operaciones. Es por ello, por lo que si vemos que no podemos hacer frente a nuestras deudas, lo mejor que podemos hacer es intentar refinanciar el préstamo o reunificar deudas, con el objetivo de no caer en el apartado de morosidad.
Con esta opción vamos a tener como resultado un nuevo préstamo, el cual podremos alargar en el tiempo, con el único objetivo de conseguir que las cuotas mensuales sean lo más pequeñas posibles y por ello poder hacer frente a las mismas sin entrar en el apartado de morosidad, del cual es muy complicado salir.
Para este tipo de operaciones podríamos usar una de las siguientes vías. Eso sí, antes de realizar cualquier tipo de operación tendremos que estudiar bien la situación, con el objetivo de no endeudarnos más, si sabemos de primera mano que no vamos a poder hacer frente tampoco al préstamo resultante.
Préstamos con garantía hipotecaria.
Empeño de bienes para conseguir liquidez rápida.
Mini préstamos.
Eso sí, como bien hemos dicho, merece la pena estudiar bien el caso, con el objetivo de ver si realmente podremos hacer frente a las cuotas mensuales restantes una vez que hemos realizado el cambio. Y es que en algunas ocasiones puede ser interesante aligerar las cuotas, a pesar de que ello suponga tener que pagar más intereses a largo plazo y como consecuencia tener que pagar más tiempo al previsto.