Si quieres solicitar un minicrédito cobrando el paro, tienes que saber que muchas empresas te ofrecerán el dinero, debido a que no solo tendrás ingresos mensuales asegurados, sino que además como el importe de dinero a solicitar es pequeño, seguramente no tendrás problemas a la hora de conseguir la financiación que quieres conseguir. Pero este motivo, pasamos a ver algunas de las mejores opciones.
Tabla de contenidos
¿Qué mini préstamo solicitar si cobro el paro?
Antes de entrar en detalles, te vamos a mostrar una tabla donde podrás ver de manera resumida y actualizada las mejores opciones que tienes a día de hoy para conseguir el dinero, aunque también te vamos a dejar un enlace de los mejores minipréstamos, por si le quieres echar un vistazo.
Una vez visto esto, vamos a dar paso a ver las mejores empresas que te permitirán conseguir dinero fácil, aunque en la tabla lo podrás ver todo bien organizado y actualizado.
Crédito al instante Vivus
En este caso podrás solicitar hasta 900 euros, aunque si eres nuevo cliente podrás solicitar hasta 300 euros. Eso sí, con la ventaja de que el primer préstamo será gratis.
Créditomas
En este caso podrás solicitar de 50 a 500 euros y devolver el dinero en un periodo de tiempo de 7 a 30 días.
Creditorapid
Es otra opción que tienes a día de hoy a la hora de conseguir dinero, sabiendo que el importe será el mismo que en el caso anterior, aunque solo tendrás hasta 15 días para devolver el dinero.
¿Cuándo debo pedir un minipréstamo estando en el paro?
En primer lugar, este tipo de financiación la tendrás que solicitar siempre y cuando estés seguro de que vas a poder devolver el dinero.
Por otra parte, tiene que saber que si pides el dinero lo tendrás que devolver a tiempo, junto a los intereses y posibles comisiones, las cuales dependerán de cada opción.
Finalmente, debes saber que si una empresa no te concede el dinero, otra puede que lo haga, por lo que te recomendamos que lo intentes hasta que alguna te de el visto bueno.
Eso sí, volvemos a repetir, siempre deberás pedir dinero cuando realmente lo necesites y sobre todo cuando sepas que lo vas a poder devolver fácilmente, a pesar de que estés desempleado.