La financiación flexible Seat es una buena opción para comprar un vehículo de marca pagando a cómodos plazos. Pero antes de lanzarnos de cabeza a la financiación, es importante que miremos una serie de detalles de esta práctica para ver si realmente se adapta a lo que estamos buscando o no.
Tabla de contenidos
Resumen de la financiación flexible Seat
A través de este sistema podrás elegir durante los primeros 4 años que hacer con el vehículo, esto quiere decir que si no lo quieres, siempre lo puedes vender y adquirir otro de la marca para seguir renovando el coche. Siempre pagando la diferencia.
Con este sistema podrás renovar tu coche al finalizar el contrato por unos nuevos. Como he comentado antes, pagando la diferencia.
Si no te interesa cambiar de vehículo, tan solo tendrás que seguir pagando lo que te quede de financiación, en caso de que te quede y el vehículo lo tendrás para ti.
Si ninguna de las dos opciones anteriores te interesa, siempre podrás devolver el vehículo. En este caso, Seat te abonará el precio mínimo pactado al firmar el contrato.
Gracias a esto, podrás elegir que hacer con tu vehículo al finalizar el contrato, de aquí que cada vez más personas usen este sistema a la hora de comprar un coche Seat.
Ventajas de la financiación flexible Seat
Puedes disfrutar de una buena libertad al finalizar el contrato. Y es que dependiendo de tus necesidades, podrás renovar, vender o quedarte el vehículo.
Mientras dura el contrato, el propietario del coche será tú, es decir, puedes hacer con el vehículo lo que quieras, cosa que es de agradecer.
Es una forma de ahorro. Y es que con un buen plan flexible podrás conducir coches que no podrías conducir de otra manera por su elevado precio. Siempre tienes la opción de estudiar y ver si realmente este plan te interesa o no.
A la hora de reparar los vehículos, siempre lo harás a través de la red de Seat. Esto te dará seguridad de que las reparaciones serán de calidad y por ello tu vehículo siempre estará en perfectas condiciones.
No olvides que a la hora de firmar el contrato se te dará un valor mínimo por el vehículo. Este valor será el dinero que te dará la marca en caso de que decidas vendérselo.
Siempre conseguirás un precio un poco más económico.
Ejemplo de financiación Seat
No hay nada mejor que poner un ejemplo para poder entenderlo.
Supongamos que vamos a comprar un coche financiado y el precio con descuentos es de 26500 euros. En cambio si no lo financiamos, no nos darán descuentos y el precio a pagar sería de 27900 euros. Como podemos ver, ya estamos ahorrando. (Si es verdad, no es lógico que financiado sea más barato que pagado al contado, pero en todas las marcas sucede esto).
En un caso nos ofrecen pagar una entrada de 14500 euros, una última cuota de 13900 euros y 35 a 59.29 euros. Esto quiere decir que a pesar de financiar, el vehículo saldrá 4000 euros más caro. Siempre y cuando no tengamos que refinanciar la última cuota. En este caso podrás devolver el dinero y evitar esa cuota o adquirir un nuevo vehículo, a cambio de unas condiciones que tendrás que negociar de nuevo.
Otra opción si quieres quedarte el coche en un principio, es la de pagar 47 cuotas de 124 euros y una cuota final de 10860 euros, en caso de que te quedes el vehículo. Esto quiere decir que en conjunto pagarías un total de 31187 euros, es decir, unos 5000 euros de intereses.
Ahora tiene que mirar si te interesa o financiar a través de un plan estándar que también está disponible en la marca y del cual te hablaremos en los próximos días.
Y ten en cuenta que es un ejemplo, para ver como te quedaría, tendrás que solicitar un presupuesto y ver si realmente te interesa o no. Los datos como los intereses podrían variar, de aquí que diga que solo es un ejemplo.